Desde nuestra clínica dental en Cangas do Morrazo queremos enumerar algunas de las medidas útiles que podemos tomar de ahora en adelante para cuidar de nuestra sonrisa. Debido a la pandemia global por coronavirus y al confinamiento, nuestras vidas han cambiado y hemos tenido que tomar una serie de medidas para adaptarnos a esta nueva normalidad.

Uno de los aspectos que también ha variado es nuestra salud e higiene oral. Aunque no lo creas, es muy importante adaptar nuestra rutina de higiene oral de cada día, ya que, según diversos estudios, la COVID-19 se encuentra en la saliva.

Una rutina de higiene oral que evite la carga viral de la COVID-19

  • Enjuagues bucales puros y sin diluir: según ha señalado el Centro de Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, es fundamental que la rutina de higiene oral de cualquier persona evite que la carga viral de su cavidad y de sus utensilios de higiene bucal sea muy alta. Para ello, se recomienda el uso de complementos como los enjuagues bucales puros, sin diluir.
  • Cepillar tus dientes: realizar este proceso como siempre, con pasta dentífrica con flúor, durante 2 minutos y, al menos, 2 veces al día.
  • Lavar y desinfectar el cepillo: al acabar el cepillado, es necesario eliminar todos los restos de pasta de dientes y comida del cepillo enjuagándolo. Además, se recomienda desinfectar el cabezal del cepillo con agua oxigenada diluida al 1 % o povidona iodada al 0.2 % durante 1 minuto o sumergiéndolo en un vaso con una solución a base de hipoclorito de sodio (lejía) durante 30 minutos; una vez transcurrido este tiempo, se debe aclarar con agua y dejar secar. No debemos olvidar que tener el cepillo libre de bacterias y virus ayuda a disminuir el contagio con los cepillos de las personas que están cerca.
  • Secado del cepillo: tras lavar y/o desinfectar el cepillo de dientes, hay que secarlo bien dando vueltas de izquierda a derecha para eliminar la humedad y el agua.
  • Almacenamiento: hay que guardar los cepillos lejos del inodoro y del lavabo para evitar las bacterias de estas zonas, al menos 1 metro. Si puedes, guarda los cepillos sin amontonarlos, para evitar la contaminación cruzada.
  • Cambiar el cepillo de dientes regularmente: al menos cada tres meses e, incluso, antes si las cerdas se desgastan. Esto ayuda a garantizar que se esté cepillando los dientes de manera efectiva y ayudará a prevenir la propagación de bacterias.

Desde nuestra clínica dental en Cangas do Morrazo queremos ayudar a todos nuestros pacientes a adaptarse a esta nueva realidad provocada por la COVID-19, en la que la sonrisa vuelve a ser una vez más protagonista. ¡Estamos aquí para cuidar de ti!